Una estación que cuenta con un proceso de medición de tanques de combustible impreciso pone en riesgo toda su operación.

Ello ocurre porque el único control, cuando no se utiliza un sistema automatizado, es una regla para verificar manualmente la entrega.  Con respecto a este escenario, lamentablemente existen varias anécdotas de descarga de combustible realizada de forma deshonesta, lo que termina por impedir una gestión eficiente y posiblemente terminan generando pérdidas financieras.

Al no lograr planificar la compra de combustibles y verificar la descarga correctamente, el propietario de la estación está automáticamente corriendo riesgo de perder existencias y quedarse sin producto disponible.

De esta forma, el margen de error en el proceso de medición de combustible afecta directamente la operación de la estación, repercutiendo sobre el flujo de compra y venta del producto. Cabe recordar que las existencias son dinero.

Invierta en un sistema automatizado de control de las existencias de la estación de servicio.

Una estrategia que se viene adoptando en muchas estaciones para que el monitoreo sea más eficiente, es el uso de un sistema automatizado.

El módulo de reconciliación, por ejemplo, es una función disponible en algunos sistemas de medición de tanques que muestra la diferencia de combustible que se tiene al final del día, al cruzar los datos de venta y entrega con el de existencias actuales.

Esta solución es un complemento importante para perfeccionar el control contable del combustible que mueve la estación.

Se trata de una herramienta de gestión que permite identificar las variaciones del volumen de combustible teniendo en cuenta la entrega y salida de combustible, por turno o por horas, por ejemplo. Así, el dueño de la estación de servicio comienza a gestionar el desempeño de la operación en el momento que lo desee y con la posibilidad de acceder rápidamente a la información y tomar decisiones asertivas sin pérdida de tiempo.

Por ejemplo, si al acceder a la herramienta, el gestor de la estación nota que hubo una variación de 100 litros en el día, mientras que la media diaria es de 3 litros, puede analizar inmediatamente qué provocó esta discrepancia y tomar una decisión de acuerdo con el problema, como por ejemplo un surtidor sin calibración o descarga inadecuada.

Otra ventaja es que puede programar el equipo para generar una alerta cuando se produzca un gran cambio en el nivel de combustible, lo que permite realizar una gestión más precisa y asertiva, la cual puede llevarse a cabo desde cualquier lugar y en cualquier momento.